Big data por aquí, big data por allá. Es el futuro, es el presente. No obstante, existen pocas personas en nuestro país con la formación suficiente para poder hablar de big data. Esto no es algo endémico, ya que el big data es algo tan novedoso que no ha dado tiempo aún a que puedan formarse profesionales con el suficiente expertise como para utilizarlo de forma extendida.

Por tanto, debemos tener mucho cuidado cuando escuchemos hablar de big data. Según la consultora DNV GL, especializada en consultoría y análisis de riesgos, la mayor parte de empresas del planeta no han ejecutado acciones de big data en el último año. En algunos casos, el porcentaje asciende casi al 54%.

Entender el big data, una asignatura pendiente

El big data se ha metido en nuestra cama, le ha dado la vuelta y nos la ha deshecho. Esto se debe a que muchas acciones decisivas que se toman hoy en día en grandes compañías dependen de la interpretación del big data. Muchos se han lanzado a los brazos de la nueva revolución, sin entender el big data.

Solo en España faltarían 900.000 profesionales especializados en TI, y entre ellos, los expertos en big data

Según los encuestados, un 23% afirma que en su empresa no se utiliza esta técnica porque no está dentro de la estrategia, y un 24% reconoce sencillamente que no tiene capacidades técnicas para ello. Tanto capital humano como herramientas.

Los centros universitarios están empezando a añadir en sus planes docentes relacionados con las TI asignaturas relacionadas con el big data, tales como la minería de datos. No obstante, no es suficiente. Y aunque existen programas universitarios sobrados dedicados al big data, sigue siendo insuficiente para cubrir todas las necesidades de entender el big data que existen actualmente en el mercado. Solo en España faltarían 900.000 profesionales especializados en TI, y entre ellos, los expertos en big data.

Esto es, el mercado está demandando algo que solo se le puede satisfacer a cuentagotas. Y los marketers somos los últimos en recibir la gota. Necesitamos entender el big data para nuestro trabajo, ya que todos los días manejamos información significativa sobre nuestros clientes que no podemos tratar solos. Necesitamos científicos de datos, mineros de datos y expertos en estadística que nos ayuden a mejorar a diario.

Por tanto, deberemos desconfiar de todos aquellos que hablan de big data gratuitamente. El buen profesional dedicado a esta tarea es muy complicado de encontrar. Por suerte, existen herramientas y empresas que pueden ofrecernos servicios subcontratados con big data, y dar sentido al enorme rompecabezas que supone esta nueva técnica de comprensión de datos complejos. Esperemos que el futuro vaya clarificando esto y poco a poco salgan más profesionales preparados para dar servicios a nuestras necesidades.